Sentir Ansiedad en algún momento de la vida es normal y que a todos nos ocurre y generalmente común en situaciones estresantes de la vida como mudarse, cambiar de trabajo o tener problemas financieros.
Controlar los sintomas que nos produce la ansiedad es importante para poder detectar cuando los síntomas de ansiedad se vuelven más significativos que los eventos que los desencadenaron y comienzan a interferir con tu vida, siendo una clara señal de que estamos sufriendo un trastorno de ansiedad y tener que recurrir a un especialista para superarlo.
A continuación te presentamos 3 de los síntomas más comunes de un trastorno de ansiedad que debes conocer para saber si debes acudir a un profesional
1. Sentimientos de agitación
Un síntoma más que evidente cuando una persona se siente ansiosa, es que parte de su sistema nervioso simpático se potencia desencadenando una serie de efectos en todo el cuerpo, como un pulso acelerado, palmas sudorosas, manos temblorosas y boca seca.
Estos síntomas suceden porque el cerebro cree percibir un peligro y comienza a preparar el cuerpo para reaccionar ante la amenaza.
El cuerpo desvía la sangre del sistema digestivo hacia los músculos en caso de que se necesite correr o pelear. También aumenta el ritmo cardíaco y agudiza los sentidos.
Este tipo de efectos serían útiles en el caso de una verdadera amenaza, sin embargo, pueden llegar a resultar debilitantes cuando el miedo está en tu cabeza y se mantiene en el tiempo.
2. Músculos tensos
Sentir los músculos tensos la mayoría de los días de la semana es otro síntoma frecuente de ansiedad, a pesar de que no se entiende completamente por qué se asocia con la ansiedad.
Es posible que la tensión muscular como tal aumente la sensación de ansiedad, pero también es posible que la ansiedad conduzca a una mayor tensión muscular, o que la causa de ambas sea un tercer factor.
Resulta interesante que aplicar un tratamiento para la tensión muscular realizando terapia de relajación muscular ha demostrado reducir la preocupación en personas con trastorno de ansiedad generalizada.
3. Dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido
Existe una fuerte relación entre los trastornos del sueño y los trastornos de ansiedad. Despertarse en mitad de la noche y tener dificultad al conciliar el sueño son los dos problemas bastante comunes. Incluso se ha llegado a relacionar que padecer insomnio durante la infancia con el desarrollo de ansiedad más adelante.
Si bien el insomnio y la ansiedad están estrechamente vinculados, no está claro si el insomnio contribuye a la ansiedad, si la ansiedad contribuye al insomnio, o ambos.
Lo que se sabe es que, al tratarse el trastorno de ansiedad subyacente, el insomnio a menudo también mejora.