10 causas de la ansiedad mas frecuentes

En la gran mayoría de las personas que han padecido ansiedad en alguna ocasión se debe principalmente por alguna de las 10 causas de la ansiedad que se se comentan a continuación:

Las 10 causas de la ansiedad más frecuentes

Consideramos que conociendo las 10 causas de la ansiedad podrás actuar par prevenirte y cuidar aún más tu bienestar y evitar sufrir periodos de ansiedad en tu vida:

1. Acumulación de estrés durante un periodo prolongado

Hay situaciones que nos generan estres. El problema es cuando esa situación se prolonga en el tiempo que hace que nuestro sistema esté en constante alerta, disparando nuestros niveles de ansiedad y poniendo en peligro nuestro bienestar psicológico, físico y emocional e induciéndonos a la apatía, la irritabilidad, etc.

2. Situaciones con elevada carga emocional

Cuando vivimos situaciones desagradables y/o traumáticas tienen un impacto emocional en las personas que hace que estén más predispuestas a padecer ansiedad, ya que se pueden percibir como amenazas situaciones que la persona asocia a acontecimientos vividos anteriormente.

3. Ser personas con hipocondría, con miedos frecuentes y/o hipervigilantes

Ser personas con hipocondría, miedos frecuentes y/o hipervigilantes hace que los niveles de ansiedad estén en un continuo ‘sobre aviso’. Los niveles pueden estar más elevados por el simple hecho de estar pendientes.

4. Una vida desorganizada

Mantener una organización y una rutina es importante para tener una sensación de control y de realización en el día a día. Cuando llevas una vida desorganizada puede hacer que la ansiedad aparezca con mayor frecuencia, debido a que habrá situaciones que no estaban dentro de esa desorganización y que hagan que la persona se alarme, no sepa cómo gestionarla, etc., produciéndose así, sintomatología ansiosa.

5. Tener algún tipo de adicción

Las adicciones son factores de riesgo directo para padecer ansiedad. Por adicción entendemos cualquier conducta que se vuelva dependiente de ‘algo’, bien sea del juego, de las drogas, de las compras, de las nuevas tecnologías, etc. Las personas que tienen alguna adicción siempre van a girar en base al estímulo al que sean adictas, de tal manera, que cualquier plan que interfiera y/o dificulte esa adicción, será una causa que facilite la ansiedad.

6. Insatisfacción en las redes sociales

Un factor de prevención para no padecer ansiedad es tener una red social satisfactoria, por lo que una causa de padecer ansiedad es no tenerla, o lo que sería peor, tenerla insatisfactoria. Las personas somos seres sociales y por lo tanto necesitamos del contacto y de la interacción con los demás para tener calidad y bienestar en la vida. Una red de apoyo insatisfactoria hace que el equilibrio y la armonía no fluyan, haciendo que la ansiedad esté presente.

7. Mantener una vida poco activa y/o saludable

Es popularmente conocido que el deporte es bueno para nuestra salud, pero no se menciona tanto que además es bueno para nuestro cerebro y salud mental. El ejercicio físico (sea al nivel que sea), produce neurotransmisores que tienen relación con el bienestar, la felicidad, etc. Es una vía de escape a todas las preocupaciones y rumiaciones que se acumulan en forma de pensamientos en el cerebro. Por eso mismo, si tienes una vida poco activa y poco saludable, la ansiedad puede ser una compañera en tu vida…

8. Tener predisposición biológica

Tener familiares que han padecido algún trastorno de ansiedad no es una causa condenatoria, pero sí un factor de vulnerabilidad.

9. No controlar ni poner límites a los pensamientos

Los límites claros son necesarios. Hay que poner límites (dentro de una lógica) a los pensamientos. ‘Salir del bucle’ podría ser el que haga que se frene la ansiedad y no vaya a más. A veces hay que saber decir ‘stop’ y parar los pensamientos para que no retroalimenten la ansiedad.

10. No aceptar los cambios y la realidad en la que te mueves

Aceptar no es lo mismo que resignarse. Es necesario aceptar las emociones que tenemos, las situaciones por las que atravesamos y la realidad en la que nos encontramos. Desde la aceptación surge el cambio. No puedes pelearte y encontrarte en constante conflicto, pues además de cansarte, hará que vivas todo con ansiedad.